Hancock

Un superhéroe tiene muy mala imagen de cara al público debido a los daños que causa cuando resuelve crímenes y a su alcoholismo. Un consultor de relaciones públicas corporativo, tras ser salvado por el superhéroe, intentará devolverle el favor mejorando su imagen pública. Pero mientras intenta mejorar su reputación, éste corteja en secreto a su mujer.

Esta claro que en el mundo del cine todo es más facil. Son innumerables los intentos de editoriales menores en Estados Unidos de crear líneas de superhéroes que funcionen. Pocos son los que lo han conseguido realmente dejando atrás a un publico minorista capaz de ver los dones que numerosas publicaciones poseían.

Sin embargo, peliculas como Jumper o Hancock, gracias a la extensión del cine logran con facilidad lo que las pequeñas editoriales consiguen a duras penas. ¿Para que hacer una pelicula sobre superman pudiendo hacer una producción que trate de un personaje anónimo con sus mismos poderes? Pero ojo, el simple hecho de tener tíos con poderes embutidos en cuero (ya quedaron atrás las añoradas mallas) no es sinónimo de entretenimiento. Reconocemos que el tema de los poderes es una formula atractiva que engancha. Pero hay que saber contar buenas historias. Por lo menos entretenidas. Y si además de entretenidas, son complejas como ocurre con el mundialmente aclamado Caballero Oscuro, entonces podemos quitarnos el sombrero.

El filme que nos ocupa afortunadamente cumple al menos con los requisitos minimos. Hancock es una película muy divertida (o entretenida si prefieren cambiar de sustantivo con las diferencias que puede implicar). Eso si, esta a años luz de las grandes obras. La trama es muy tipica. Un protagonista odiado que se reforma gracias a un amigo que confía ciegamente en el, con unos villanos mediocres que una vez reformado sufriran la justicia del heroe e intentarán volver para cobrarse su venganza. La pelicula de por sí no es larga (88 minutos) y una vez que Hancock aparece como el nuevo heroe de la ciudad uno se pregunta realmenten que más puede dar de si el argumento.

Es en este momento cuando un curioso giro habilmente ocultado (al menos para aquellos que gustamos de no destriparnos las peliculas antes de ir a verlas) consigue que la historia no decaiga en la recta final. Que nadie se espere, repito, una grandiosidad en ningun momento. Simplemente una palmadita en la espalda a los guionistas, que han sabido hacer su trabajo de forma digna. Punto. En peliculas como estas son muy importantes los efectos. El superhéroe que nos ocupa no es fino y delicado (ya sea borracho o reformado) por lo que todas las escenas de acción derrochan caos. Sin embargo, tanta exageración se ve ligeramente empañada por unos efectos mejorables. Es de tener en cuenta que estan bien hechos. Pero especialmente en los movimientos de las personas hay momentos en los que no son creibles del todo.

No deja de resultar sorprendente en que manera las historias de heroes con poderes (los adorados superheroes) siguen atrayendo al publico de semejante manera. Despues de casi una centuria conviviendo con ellos, uno podría llegar a pensar que ya esta todo contado, sin embargo, salvando las distancias, siempre aparecen nuevos personajes que tienen algo que contar. Más o menos sorprendente, eso si. Pero todos nos sentamos como niños a escuchar qué es lo que nos tienen que decir.

En definitiva. Una pelicula muy entretenida, que posiblemente no justifique que la tengamos en casa para volver a visionarla una y otra vez. Pero que no nos importará poner en alguna ocasión que nos visite alguien que no la haya visto.